La Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León ha decidido cortar por lo sano y ha suprimido la modalidad semipresencial de los cursos para obtener el preceptivo carné de manipulador de productos fitosanitarios. Una orden del departamento de Milagros Marcos suprimía el pasado viernes toda referencia a la formación on line, que sólo precisaba la asistencia de los profesionales inscritos en la modalidad a las sesiones de carácter práctico. La supresión de los cursos en la red llega después de que la organización agraria Asaja denunciara en febrero ante el Consejo Regional Agrario irregularidades en la impartición.

Según explicó ayer la consejería, el año pasado «se cumplió el objetivo de formación de todos los aplicadores de fitosanitarios de uso profesional de Castilla y León», lo que unido al «bajo volumen de usuarios de la Comunidad que optaron por el sistema semipresencial y en aras a mejorar la calidad de la formación» se ha decidido suprimir la formación on line. Pero, además, Agricultura reconoce «determinadas incidencias en este sistema», registradas en su mayoría en cursos «que se impartían para usuarios de fitosanitarios de otras comunidades autónomas».

Agricultura apunta que las inspecciones del Servicio Territorial y del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de la Comandancia de León «han motivado la apertura de procedimientos administrativos», que podrían derivar,si procede, «en la retirada del reconocimiento como entidades de formación» a las empresas en las que se han observado irregularidades.

La participación de profesionales de Galicia en los cursos semipresenciales para obtener un carné obligatorio desde el 26 de noviembre resultó lo suficientemente llamativa como para que los medios de esta comunidad pusieran el foco en el fenómeno.

El secretario general de Asaja, José Antonio Turrado, manifestó ayer que, tras la denuncia de su organización, la Consejería de Agricultura «propuso una mayor vigilancia de la formación on line. Sin embargo, ahora nos encontramos con la supresión de esta modalidad, quizá porque se hayan dado cuenta de la dificultad que existe para su control», opinó.

El dirigente de Asaja se mostró conforme con la decisión, «porque es lo que habíamos pedido desde un principio. Estos cursos eran un coladero, una forma de comprar el carné y no una capacitación real, porque las empresas iban a cobrar a cambio del carné».

Por su parte, la empresa leonesa Naturgeis criticó en un comunicado la supresión de la modalidad por perjudicar a todas las empresas que la ofrecían y no sólo a las infractoras, más aún por la inversión que han realizado en plataformas electrónicas de formación y que ven ahora perdida. La mercantil, que será la última en impartir cursos semipresenciales, ofrece sus servicios a los afectados por la decisión, a través de la Cámara de Comercio de León y los ayuntamientos con los que colabora.

A. DOMINGO | REDACCIÓN
Noticia del Diario de León del 05/05/2016